Comenzó como una vocecita apenas
audible… hace años ya.
Conforme fue pasando el tiempo se
fortaleció, se nutrió, creció y se transformó en un estridente grito.
Ahora parece una voz amplificada a
través de un altavoz… me está dejando sorda!!.
Este reclamo interior se está volviendo
imposible de ignorar. Esta exigencia de buscar a ese ser que aporto la semilla
para formar el embrión que me trajo hasta aquí, es una asignatura que no puedo seguir posponiendo, es un círculo que debo cerrar….
Uno de tantos!
Y es que entre más me conozco más ganas
me dan de conocerlo…
De algún lado tuvo que salir mi
melomanía, mi vena soñadora, mis contradicciones y todo este torbellino de locuras y emociones que me
invade….
Quiero pensar que sus genes tienen mucho que ver!
Quiero pensar que sus genes tienen mucho que ver!
Tantas veces me he reprochado no guardar
ningún recuerdo de usted…
Mi habilidad para archivar lo intangible me viene desde la infancia, en mi memoria habitan muchos olores, sabores, colores, sonidos.... escenas de mis primeros años de vida…. Y sin
embargo, no poseo ninguno de esos recuerdos que me platican y que tanto desearía
llevar atados al corazón… no recuerdo su mano alborotando mi cabello ni las
golosinas que nos regalaba a escondidas de mi madre…. No recuerdo nada sobre
usted!!…
No hay ninguna pretensión tras la idea
de buscarlo… solo ver su rostro, solo confirmar si es verdad que me parezco a usted,
solo intentar reconocer mi mirada en la suya y conseguir esta importante pieza
de mi propio puzzle…
Volver a Verte
Shaila Durcal
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