"Let the world change you and you can change the world"

Me gustan los viajeros....

Me gusta su sonrisa amplia, sus ojos llenos de mundo y sus zapatos ligeros, su atuendo sin pretensiones y la naturalidad que brota de una esencia primitiva rescatada en esta era donde las anclas son lo de hoy.
Ellos han elegido el traje del nómada: el de antaño, el que no permanecía estático, el que de tanto andar se volvió etéreo.

Se cuelan sigilosos entre las fronteras, con todo en regla, jugando el juego que les ha sido impuesto, pero sin perder la oportunidad de susurrarle al oído a esos absurdos bordes: "Tú no me vas a detener"....

Me gustan por que guardan la conciencia de que este mundo nos pertenece a todos y a causa de eso, el amor por la Madre Tierra se les vuelve religión. Saben que todo cuanto existe proviene de la misma fuente, saben que cada grano de arena, cada copo de nieve, cada planta, cada ser vivo por pequeño que sea es en cierto modo una extensión de si mismos, por que al final del día todo y todos estamos conectados de una y mil formas, todos formamos parte del mismo escenario donde no es posible "cortar una flor sin molestar a una estrella"....

Me gusta su valor, pero sobretodo me gusta su amor por la vida, su espíritu inquisitivo, su alma aventurera, ese gusanito que triunfa a pesar de las voces que dicen que escuchar a ese bichito es una reverenda tontería.....
Me gusta su capacidad de poner a prueba sus propios límites, su sabiduría para saber que las lecciones mas importantes están allí afuera y hay que ir por ellas, me gusta el tic-tac de su corazón inquieto y el apuro de sus propios pies que les ha revelado que su destino los alcanzará mas fácilmente si se ponen en movimiento....
Me gustan por que tienen la audacia de cambiar las certezas y la comodidad por un amplio horizonte donde todo puede ocurrir,  donde no hay nada escrito, donde la vida no es predecible, donde posiblemente no haya colchones mullidos y duchas calientes...
Pero justo ahí radica la magia, justo ahí esta lo excepcional del acto... por que en esa arriesgada apuesta al final salen ganando... han  abandonan las fragancias "artificiales" por el olor a tierra mojada y el sencillo perfume de una flor silvestre, sabiendo que son estos últimos, los aromas que un buen día, en el futuro, los regresaran al memorable tiempo en que su vida era una gran aventura.... han decidido dejar de ver paisajes espectaculares solo en el fondo de pantalla de su computadora, para llenarse de atardeceres, de mar, de montaña, de cielo... de vida!

Con suelas gastadas y equipajes ligeros van descubriendo en cada persona que les tiende la mano a un hermano, a una hermana, sin importar si su aspecto o manera de pensar es distinta a la suya.
A pesar de las estadísticas de horror siguen confiando en la mirada de un desconocido y en la buena voluntad del ser humano.
Saben que ni la mas opulenta de las residencias, ni la cama mas fina se compara con el lujo de dormir alumbrados por una luna enorme con un cielo tachonado de estrellas, han decido cambiar las alarmas por un dulce despertar con las primeras caricias de un tímido sol que se despereza con precaución....
.....Para ellos todos los días son domingo, para ellos cada instante es una celebración, cada inhalación es una oportunidad y cada exhalación es una promesa.... cada segundo es un regalo....

Terminan con los bolsillos vacíos y el cuerpo cansado pero con la seguridad de que han ganado mucho mas de lo que han perdido.
Ahora saben bailar todos los ritmos...
Ahora saben que su hogar es mucho mas grande que una casa de dos habitaciones en algún suburbio....
Ahora saben que su afectos esparcidos por aquí y por allá son ya una prolongación de sus propios latidos y que tarde o temprano todos los senderos se vuelven a cruzar......
Su paladar esta entrenado para probarlo todo, sin remilgos ni prejuicios...
Han aprendido a curarse con las medicinas de la tierra y no recibieron la lección en una escuela, mirando distraidamente las fotografías de mil hierbas en un libro y memorizando sus nombres en latín, sino en las manos de alguna viejecita que les enseñó que hay brebajes que pueden curar desde un "dolor de panza" hasta un corazón roto..... ahora ya saben los secretos de la ruda, del romero, de la damiana y el gengibre....

Su vida jamás volverá a ser la misma, ahora caminarán mas lento, respirarán mas profundo, procurarán mirar siempre a los ojos y sonreirán mas a menudo por que saben que esos son los pasos iniciales para poder vivir conectados consigo mismos y con los demás....

Después de un viaje de auto-descubrimiento se hereda la posibilidad de ser un viejo o vieja que concluya sus días con la sensación de haber vivido plenamente, con un montón de recuerdos valiosos, millonarios en afectos... satisfechos por que al final esos son los únicos "bienes" que podemos llevarnos.....

Y no, esto no es una forma romántica e idealista de ver a un honorable viajero... es lo que he aprendido desde hace algunos meses leyendo sus bitácoras, mirando sus fotografías y "sintiendo" lo que transmiten esas imágenes donde graban sus miradas y sonrisas.....

Antes solía considerarme una viajera anclada, pero hoy por hoy tengo la absoluta certeza de que el sitio al que pertenezco se encuentra en el pequeño espacio reservado para mí entre un par de brazos que cuando me sujetan me hacen sentir en casa....
Hoy sé que la posibilidad de conocer el mundo y sus maravillas tiene mucho mas sentido si la compartes con quien siempre sera tu brújula....